lunes

° ° ° es verdad, fui atacada° ° °

Caminaba yo por Alameda para llegar al estacionamiento de mi hermano, en calle Londres... iba meditabunda, pensando en quién sabe qué; el hecho es que no me cabe en la cabeza cómo podía andar con tanta calma en medio de tal horda, lumpen, que se expandía por la explanada dando empujes, robando, peleando, etc.

Así iba yo, como siempre en mi mundo, órbita creada por mi extraña cabeza, tranquila, mirando, pensando o quizás cantando... Derepente ya la masa uniforme expandida se hacía terrorífica y el hecho de avanzar se subsumía a la ensoñación, así que paré y los individuos continuaban su trayecto, pero paré medio segundo! Allá las cosas tienen que ser eficaces y el "señor peatón", muy audaz y extremadamente atento. Cosa que yo, santiaguina pseudo provinciana, no estaba cumpliendo como debía. Quizás sería algún castigo divino o tan sólo mala suerte. Nosé porque siempre se tratan de atribuir culpas, pero fui atacada por una desaforada paloma, se elevó desde su submundo putrefacto hacia la cándida-distraída (ríanse si quieren) tez de mi rostro. El curioso animal aleteó y aleteó en mi cara, siento que fue mucho tiempo, pero repito; el factor tiempo mínimo, a esa hora y en ese lugar se expande con las experiencias.
En fin, la paloma pudo elevarse -qué afortunada-, pensé. Era capaz, gracias al apoyo que le había dado mi semblante, de evadir ese terrible, inmenso, innegable, inagotable, indeseable e ineludible "Titán" conformado por personas.

Pero otra cosa me llamó la atención; el suceso no me dio asco alguno, entendí al animal y ojalá durante nuestro contacto me hubiese brindado su capacidad etérea, comprendí su desesperación frente al ruido, la misma que sentía yo y de la que trataba mediante mis propios medios, pocos atributos, de evitar.

Ese gris inminente lo compartíamos, ella en sus alas y yo en el color de mi cara desgastada. Siempre me han caído bien, a tí Gaspar?

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Comentarios:
Al menos sólo usó tu rostro de apoyo. A mí me cagó una paloma hace como 1 mes en el metro Est. Central. Limpiándome la mierda de la oreja y el pelo, mientras una decena de hijos de puta se cagaba de la risa... Cosas que pasan no ?
 
OOh me paso algo similar, estaba leyendo en una de esas bancas del parque forestal, pero sentado en el respaldo. Cerré el libro lo metí en la mochila y me baje de la banca de un salto, pisé blando, pero = se movía, no era un mojón de perro, maté una paloma.
 
Satánico jaja
 
Satánico jaja
 
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